Antes de evaluar cuando le queremos enseñar a nuestros hijos, cuál es el monto a ahorrar, deberíamos repasar en nuestro interior, qué ideas tenemos sobre el dinero. Son estas creencias las que seguramente le estamos transmitiendo a nuestros hijos, que aprenden observando todo lo que nosotros hacemos. 

Nuestra personalidad influye de forma decisiva en cómo manejamos el dinero y en cada uno de los aspectos de administración de nuestra economía. 

A medida que vamos creciendo, vamos desarrollando una idea de lo que es el dinero, la que está, sobre todo durante nuestra niñez, muy influenciada en lo que nuestros padres nos traspasen de acuerdo a este tema. 

En general, crecemos con la idea de que el dinero es un problema y vamos generando una relación más bien lejana con él, traduciéndose en que nos cuesta hablar de este tema, cobrar, poner precio a nuestros productos y servicios o pedir aumento de sueldo.

Pero tenemos la oportunidad de reprogramarnos respecto al dinero y redefinir lo que tenemos en la mente, sólo debemos encontrar el origen de esos patrones para dejar de sentirnos frustrados o angustiados.

Debemos investigar en nuestro  interior y cambiar esos patrones que están en el fondo. Además de solucionar nuestra relación con el dinero, seremos capaces de transmitir los mensajes adecuados a nuestros niños.

Para facilitar la comprensión de la relación que tenemos con el dinero, se han definido varios arquetipos. La definición de arquetipo es “Modelo original que sirve como pauta para imitarlo, reproducirlo o copiarlo, o prototipo ideal que sirve como ejemplo de perfección de algo”. Si bien cada persona es única, esto sirve como referencia. 

Lo interesante de estos modelos es que sirven para identificar fortalezas y debilidades para trabajarlas y potenciarlas de forma más eficiente.

Son 8 arquetipos que menciona la literatura, con diferentes nombres:

  1. Alquimista: la idealista dentro de ti, puede tener una relación de amor odio con el dinero.  Riesgo: no comprender que el dinero es un catalizador para la transformación.
  2. Cuidadora: la patrocinadora dentro de ti. Riesgo: que te hagas cargo de la gente que te rodea.
  3. Acumuladora: la banquera está dentro de ti, te gusta ahorrar y estar tranquila. Riesgo: culpa excesiva al realizar las inversiones
  4. Conectora: la relacionadora pública dentro de ti. Riesgo: al buscar siempre las relaciones cuesta obtener la independencia financiera.
  5. Gobernante: la constructora de imperios dentro de ti. Riesgo: te cuesta disfrutar el presente.
  6. Romántica: la hedonista dentro de ti. Riesgo: dado que gozas mimándote puedes poner en riesgo las finanzas.
  7. Disidente: tienes a la rebelde con causa dentro de ti.  Riesgo: por el afán de arriesgarse puede llegar a perder mucho dinero o la libertad financiera.
  8. Celebridad: la mujer distinguida dentro de ti. Riesgo:  puedes gastar de forma impulsiva en algunos momentos.

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Por andrea beher

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